A continuación, puede encontrar reflexiones personales sobre las prácticas científicas.
Valoro enormemente el proceso de revisión por pares. Creo que es fundamental comprender que los revisores forman parte del mismo equipo que los autores, ya que dedican su tiempo a contribuir a la difusión del conocimiento científico, asegurando su rigor y mejorando los manuscritos de los autores al abordar sus deficiencias y ofrecer nuevas perspectivas . A su vez, me alegra formar parte de este proceso como revisora, ya que me permite contribuir al avance del conocimiento científico, garantizar la calidad e integridad de la investigación y participar en discusiones académicas significativas que refinan y mejoran el trabajo académico.
Mi integridad académica se basa en mi apertura sobre las limitaciones de mi investigación. No suscribo la práctica de ocultar fallos con la esperanza de que editores, revisores o lectores no los detecten. Si identifico una deficiencia en mi investigación, personalmente no me agrada la idea de confiar en la posibilidad de que nadie más la note; en su lugar, prefiero una comunicación abierta sobre lo que observo de manera integral.
Creo en discutir abiertamente las limitaciones para que los lectores también sean conscientes de los fallos de mi trabajo, lo que constituye la base de mi integridad académica.
A lo largo de los años, he desarrollado un estilo en la redacción científica. Utilizo la escritura como una herramienta para enmarcar las preguntas que surgen a partir de las conclusiones o los hallazgos empíricos, resaltar cuestiones no resueltas y reflexionar sobre ideas. También valoro enormemente las secciones de discusión en los artículos, ya que permiten a los investigadores ampliar el campo más allá de las contribuciones inmediatas al revelar nuevas áreas de exploración.
Procuro construir argumentos lógicamente sólidos, desde la formulación de hipótesis hasta el diseño de investigación. Para mí, un argumento sólido requiere especificar las condiciones bajo las cuales se sostienen las afirmaciones. Esto se basa en la construcción de afirmaciones precisas y bien definidas en lugar de vagas. A lo largo del tiempo, he aprendido que articular claramente los límites de un argumento no solo fortalece su validez, sino que también ayuda a los lectores a comprender los contextos específicos en los que se aplican los hallazgos.
La Ciencia Abierta garantiza un acceso más amplio a la investigación al eliminar las barreras de pago, haciendo que el conocimiento científico sea más inclusivo. Personalmente, defiendo la inversión de presupuesto en hacer que los artículos sean de acceso abierto, la negociación con editores si no hay financiamiento disponible y el esfuerzo por alcanzar estándares más altos para que la información esté al alcance de todos.
Estoy comprometida con las prácticas de Ciencia Abierta, como proporcionar mis materiales y datos en línea, realizar preregistros y solicitar a los editores un proceso de revisión por pares transparente para la comunidad científica.